Antonio Banderas graba en Coín la promoción de 'El lince perdido'

El actor malagueño Antonio Banderas continúa en su Málaga natal inmerso en sus proyectos cinematográficos. Ayer fue de nuevo la localidad de Coín la elegida para realizar el anuncio de promoción del nuevo largometraje de animación El lince perdido que se estrenará el próximo 26 de diciembre y se proyectará en 35 países. El lince perdido es una producción cinematográfica de Green Moon que versa sobre animales en peligro de extinción, como el lince ibérico, y a cuyo personaje principal, Félix, hará realidad Antonio Banderas.

Desde las diez de la mañana y durante dos horas aproximadamente, Banderas estuvo en la sesión de grabación, a puerta cerrada, en una de las salas de cine del centro comercial La Trocha. El escenario del anuncio es la propia sala, concretamente la primera fila de butacas, donde el actor se sienta y mantiene un diálogo ficticio con dos de los animales que aparecen en la película que, una vez realizado el montaje, aparecerán a ambos lados de Banderas.

Pero antes de comenzar la grabación el cineasta realizó algunas modificaciones del trabajo planteado y recibió a las autoridades locales, con las que estuvo conversando unos minutos antes de iniciar el rodaje del anuncio promocional. Banderas explicó al alcalde de Coín, Gabriel Clavijo, su interés por grabar alguna de las secuencias de su próxima película sobre el último rey de Granada, Boabdil, en los estudios de producción audiovisual Loasur, situados en esta misma localidad. Así mismo recibió la invitación del máximo representante local para facilitarle localizaciones exteriores para rodar el largometraje. Durante la conversación con el regidor municipal se habló también de otros proyectos como la intención de crear un concurso para guionistas.

Tras la jornada de trabajo Banderas almorzó junto a su equipo en Coín. Es la segunda vez en esta semana que este malagueño internacional visita la localidad, ya que el pasado jueves además de preparar la grabación del anuncio de El lince perdido, realizó una sesión fotográfica para la revista estadounidense Vanity Fair en los estudios Loasur.