
La publicidad en la red es la alternativa perfecta por su bajo coste y gran capacidad de alcance. No sólo permite acceder a gran número de personas, sino también delimitar con mayor facilidad la audiencia de cada marca. Sin embargo, para poder convertirla en caballo ganador es necesario realizar algunos reajustes estructurales.
El primero pasa por que las propias agencias y anunciantes creen sus divisiones específicas centradas en estos nuevos soportes. Y que estas convivan de manera estrecha con aquellas dedicadas a medios convencionales para poder desarrollar estrategias conjuntas y complementarias. Algunas marcas que ya se han sumado a esta tendencia han sido Procter & Gamble o Dell.
El segundo atiende a la fragmentación de audiencias que conlleva a una multiplicación de soportes. La convergencia de formatos es una de las claves, dando gran relevancia a la publicidad exterior.
La tercera premisa es conocer más a fondo al consumidor. Realizar estudios de mercado de mayor duración, menos rígidos y más personalizados.
Y el cuarto supuesto, y no por ello menos importante, será la obligatoriedad de sumarse a la moda verde. Ecología y desarrollo sostenible deberán encontrarse a la cabeza de los valores de toda marca que desee triunfar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario